El Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito ha fallado a favor de un hombre cristiano arrestado mientras leía la Biblia frente a la oficina del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de California, en la ciudad de Hemet.

Brett Coronado, el pastor asistente en la Capilla del Calvario en Hemet, dice que la lectura de Mark Mackey era parte del ministerio de evangelismo de la iglesia que regularmente lee las Escrituras y distribuye folletos en los parques de la ciudad y en el tribunal.

En 2011, el oficial de la Patrulla de Carreteras de California (CHP, por sus siglas en inglés), Darren Meyer, arrestó a Mackey mientras estaba leyendo la Biblia en voz alta frente a un grupo congregado en la oficina del DMV esperando que se abriera.

En un vídeo de la Capilla del Calvario, se ve donde Meyer arresta a Mackey mientras lee, diciéndole: "Puedes predicar en tu propiedad, puedes predicar en una esquina, pero no puedes predicar aquí porque es una audiencia cautiva. Están en fila, quieren hacer negocios”.

En su fallo, el Noveno Circuito señaló que un guardia de seguridad del DMV le había pedido a Mackey que se fuera y cuando no lo hizo, los oficiales del DMV llamaron a la CHP, pidiéndole que lo sacaran de la propiedad. El despacho de CHP le dijo a Meyer que Mackey estaba "acosando a los clientes que estaban esperando en la fila".

Después de que Mackey fue procesado penalmente en la corte estatal de California, presentó una demanda contra Meyer, alegando arresto ilegal en violación de la 4ª Enmienda, así como detención falsa bajo la ley estatal.

El Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito señaló que Meyer sostenía que Mackey estaba "gritando a las personas que esperaban en fila" y que había "una evidente confrontación verbal entre el grupo de hombres y las personas que estaban en fila". Meyer también dijo que el enfrentamiento fue "calentado y cerca de un estado físico".

Pero el tribunal no estuvo de acuerdo con el relato de Meyer, señalando que "esa versión de los acontecimientos está completamente desmentida por imágenes del video y audio que no revelan ninguna confrontación y simplemente muestran a Mackey leyendo la Biblia en voz alta, algo aparte de las personas que están en fila".

"Fue objetivamente irrazonable para Meyer pensar que Mackey estaba obstruyendo o intimidando a los individuos basándose en la información transmitida por el despachador en combinación con lo que vio al llegar a la escena", añadió el tribunal.

Mackey respondió a la sentencia diciendo que "todavía prevalece la justicia. Estoy emocionado de que nuestro país vaya en la dirección correcta".

Su abogado, Robert Tyler, dijo: "Me parece que el arresto y el enjuiciamiento de mi cliente fue motivado políticamente porque no estaban de acuerdo con el discurso de mi cliente, pero es por eso que nuestros fundadores crearon la Primera Enmienda para proteger incluso un discurso desagradable".