Foto tomada del Facebook de Thomas Evans, padre de Alfie Evans. 

Una corte de apelaciones en Inglaterra dictaminó que los médicos podrían dejar de tratar al bebé Alfie Evans, quien padece una enfermedad metabólica que no ha podido ser diagnosticada y tiene más de 16 meses de estar conectado a un respirador artificial.

Sosteniendo un fallo anterior de un tribunal superior que el padre de Alfie dijo que era una "pena de muerte", los jueces de la corte de apelaciones dijeron que era mejor para el niño que los médicos le quitaran el tratamiento de soporte vital, según reporta The Guardian.

La juez, la Sra. Justice King, dijo que la última evidencia médica mostraba que Alfie estaba en un "coma profundo" y que ya no se da cuenta de lo que lo rodea. 

Respaldados por un numeroso y creciente ejército de seguidores, los padres de Alfie querían llevar al niño a un hospital infantil vinculado con el Vaticano en Italia para recibir más diagnóstico y tratamiento.

La Sra. King elogió la determinación de los padres de "luchar con el ejército de Alfie", pero dijo que no tenían "un plan claro". Además, que el bienestar del niño debía prevalecer.

Aún se desconoce si los padres de Alfie buscarán impugnar el fallo de la corte de apelaciones.