Saeed Abedini da su versión sobre las acusaciones de abuso de su esposa

Saeed Abedini da su versión sobre las acusaciones de abuso de su esposa

02-01-2016

El pastor Saeed Abedini dice que ama a su esposa y que está orando por la sanación y la restauración de su matrimonio.

El sábado, Saeed emitió una declaración al periódico Idaho Statesman sobre las acusaciones de su esposa, Naghmeh, de sufrir violencia doméstica.

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"Aunque estoy lejos de ser perfecto, como un hombre o un esposo, todos los días estoy buscando la presencia de Dios, para que me moldee como Él quiera que yo sea", según el comunicado.

Abedini también dijo que gran parte de lo que su esposa escribió en Facebook y en los informes de los medios de comunicación, no es cierto.

Su esposa ha solicitado la separación legal. Idaho Statesman informa que, si bien no ha sido capaz de revisar el expediente, archivos judiciales en línea muestran que Saeed se declaró culpable de un cargo por delito menor de violencia doméstica en 2007.

El juez lo condenó a 90 días de cárcel y suspendió la sentencia, pero Saeed fue puesto en un año de libertad condicional.

Saeed dice que continuará buscando la reconciliación con su esposa en privado.

A continuación lea el comunicado completo del pastor Saeed:

Hace dos semanas fui liberado de una prisión iraní tras permanecer cautivo durante tres años y medio. ¿Mi crimen? Ser cristiano y negarme a renunciar a mi fe en Jesucristo. A lo largo de mi encarcelamiento mi esposa Naghmeh atrajo la atención nacional a mi caso y animó a millones de personas a orar por mi liberación. Dios respondió a las oraciones y me trajo a salvo a casa. Naghmeh ha sido una heroína para mí y ha sufrido enormemente como resultado de estar a 7.000 millas lejos de mí y ser una madre soltera de nuestros dos hijos preciosos durante este viaje y liderando una cruzada en mi nombre. Siempre voy a amarla por su sacrificio.

En noviembre pasado, Naghmeh comenzó a escribir acerca de nuestro matrimonio en su cuenta en Facebook y suspendió su defensa pública para mí. Sus informes de Facebook han sido reportados ampliamente en otros medios de comunicación, que plantean interrogantes acerca de mí, y el estado de nuestro matrimonio. Como prisionero en Irán no era capaz de responder a sus comentarios y acusaciones. He optado por no responder en las dos semanas que he estado de regreso en Estados Unidos porque creo que las cuestiones personales se tratan mejor en la intimidad.

Cuando llegué a los Estados Unidos fui al Centro de Entrenamiento de Billy Graham en Carolina del Norte con mis padres y mi hermana, lleno de expectativa de que Naghmeh y nuestros hijos se reunieran conmigo allí. Ella prefirió quedarse en casa en Idaho, y cuando llegué allí esta semana me encontré con la noticia de que había presentado un caso de violencia doméstica, al parecer con el fin de asegurar que nuestros niños puedan permanecer en el estado. Por supuesto, no tenía intención de llevar a nuestros hijos lejos de nuestra casa o nuestro estado.

Esta última novedad, que Naghmeh primero hizo pública, me lleva a ofrecer esta breve declaración.

1. Nuestro matrimonio está bajo gran estrés y estoy esperando y orando por sanidad y restauración.

2. Yo amo a mi esposa y quiero la voluntad de Dios para nuestras vidas.

3. Soy un pecador, salvado sólo por la maravillosa gracia de Dios. Aunque estoy lejos de ser perfecto, como un hombre o como esposo, todos los días estoy buscando la presencia de Dios, para que me moldee como Él quiera que yo sea.

4. Gran parte de lo que he leído en las publicaciones e informes de prensa de Naghmeh, no es cierto. Pero creo que debemos trabajar en nuestra relación en privado y no en las redes sociales y en otros medios de comunicación. Naghmeh escribió esta semana: "Estamos tomando tiempo personal para trabajar en asuntos personales muy graves". Tengo la intención de hacer este trabajo duro en privado.

5. El Dios al que sirvo hoy, es el mismo Dios al que serví mientras era interrogado y golpeado en algunas de las más duras condiciones carcelarias en el mundo y Él es capaz de restaurar un matrimonio que ha resistido una presión increíble. Pido oración por otra victoria.

No es mi intención hablar más públicamente a través de las redes sociales o cualquier otro canal, por lo menos hasta que yo crea que hemos hecho un progreso significativo en privado. Le doy las gracias por su comprensión y apoyo.

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