Niños haitianos reciben “cajas de alegría” que transforman sus vidas para siempre

Niños haitianos reciben “cajas de alegría” que transforman sus vidas para siempre

06-22-2017
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En años recientes, Haití ha sufrido terremotos y huracanes devastadores, al igual que pobreza extrema… pero los haitianos no se dan por vencidos. Además, un ministerio está llevando esperanza al país.

Belleza impresionante, pobreza extrema, suciedad: Haití es una mezcla de dolor y promesa. Se considera el país más pobre del occidente, con casi 80% de desempleo. Más de la mitad de la población vive con menos de $1 diario. Pero, hay una fuerza y resiliencia en el pueblo que da esperanza al futuro de la isla.

Wendy Griffith, de CBN News, viajó con un grupo de reporteros, para ver de primera mano, cómo el ministerio Cross-Catholic marca la diferencia en la nación.

A 3 horas de la capital de Puerto Príncipe, llegamos al campamento Hope South (Esperanza Sur, en español), o como le dicen en criollo: Espwa, la escuela y orfanato católico más grande, patrocinado por Cross-Catholic. Y hogar de más de 450 niños y niñas huérfanas o abandonadas.

Muchos de los huérfanos por temas “económicos”: sus padres están vivos, pero no pueden costear su cuido. Entonces los llevan al proyecto Hope, donde reciben 3 comidas al día, educación y aprenden que Jesús los ama y tiene un plan para sus vidas.

“Cuando veo a todos estos niños viviendo en Espwa y otros del vecindario viniendo por la razón de este gran evento hoy, pienso en su futuro que tendrán por medio de este grandioso ministerio. La posibilidad de una gran educación, entrenamiento local, entonces podrán marcar el lugar donde viven. Y el compromiso y el apoyo del amor en familia”.  

Hoy es un día especial: Cross-Catholic da cajas de zapatos llenos de regalos para los estudiantes… es llamado el programa Cajas de Alegría.

Esas cajas son empacadas y enviadas por familias de Estados Unidos y contienen de todo, desde juguetes hasta útiles escolares. Pero la meta número uno es poner gozo en el corazón de cada niño de Haití.

“Haití ha recibido tantos golpes a través de los años, el terremoto de 2010 y los huracanes que parecen ocurrir cada par de años. Los niños siempre sufren y queremos hacerles saber que son amados y que disfruten su niñez”, dice Steve Bostien, director del programa Caja de Alegría.

Para cientos de niños haitianos, el campamento Espwa es su única esperanza para salir de la pobreza y tener una vida mejor. Ese fue el caso de Lithian Delice, de 23 años. Fue allí de niño, porque su madre tenía 6 hijos y después que su padre los abandonó, ella no podía cuidarlo más. Recuerda cuando llegó por primera vez.

“Cuando llegué a Espwa, mi vida cambió. Vi a tantas personas que no eran mis amigos ni familia, pero interactué con ellos y vi amor, encontré amor, me dieron su amor. Me dieron educación y aprendí inglés y francés”, indica Delice.

Hoy, Delice estudia turismo y hospitalidad, y es voluntario en Espwa cuando necesitan ayuda.

Luego del devastador huracán en 2016 muchos haitianos como Jean Claude, su esposa Roline y su hija Francis viven en estado crítico, sin electricidad ni agua potable, cocinan al aire libre y comen principalmente arroz, frijoles y gallinas salvajes. Pero, hacen de la educación de su hija una prioridad.

“Al hablar con Roline, su mamá, debe ponerla en un moto-taxi cada día para llevarla a la escuela. A veces no tiene dinero, y cuando eso sucede, está tan comprometida con que ella vaya a la escuela, patrocinada por Cross-Catholic, que ella la coloca en su espalda y camina 1 hora ida y vuelta a la escuela”, comenta Bostien.

Además de proveer alimentos y educación Cross Catholic está comprometido con ayudar a muchos haitianos a reconstruir sus casas, luego de que el huracán Mathew destruyó pueblos y hogares quedando muchos desamparados.

Es difícil no ser emocional cuando eres un testigo y ves las casas colapsadas por el huracán y decenas de personas viviendo hacinadas… Es difícil no ser emocional cuando ves a seres humanos sufriendo por esta situación”.

Es una inversión de largo plazo en la vida de familias, niños y en especial de huérfanos, quienes agradecen a Cross-Catholic y ahora esperan por un futuro emocionante.