Extremistas islámicos en el norte de Uganda mataron a un pastor cristiano después de que comparó el cristianismo y el islam en una transmisión de radio el 31 de octubre.
Morning Star News (MSN), un ministerio guardián de persecución sin fines de lucro, informa que David Omara, de 64 años, pastor del Christian Church Center y un conocido predicador de radio en el área, fue golpeado y estrangulado hasta la muerte después de terminar su programa en una radio, en la ciudad de Aduku.
El hijo del pastor, Simon Okut, le dijo a Morning Star que inmediatamente después de la transmisión, alguien llamó a su padre y expresó su agradecimiento por su predicación. La persona que llamó le pidió al pastor que se reuniera con él y que él trajera algunos amigos.
"Salimos de la emisora de radio. Al llegar a dicho lugar, salieron de entre los arbustos seis personas vestidas con atuendo islámico, y empezaron a estrangular y golpear a mi padre con objetos contundentes", dijo Okut.
Mientras lo golpeaban, uno de los asaltantes dijo: "Este hombre debería morir por usar el Corán y decir que Alá no es dios, sino un dios maligno que colabora con poderes satánicos", dijo el hijo del pastor. "Mientras golpeaban a mi padre con objetos contundentes y lo estrangulaban, hui para salvar mi vida. Dos atacantes corrieron detrás de mí, pero no pudieron agarrarme".
Los residentes del área se sorprendieron por el asesinato del pastor. Los miembros de la iglesia de Omara temían más violencia, pero pudieron llevar a cabo su funeral y entierro el 4 de noviembre sin incidentes.
Después de enterrar a su esposo, la esposa de Omara se desmayó y fue llevada a un hospital local, donde fue tratada por el shock, dijo Okut.
Otros pastores elogiaron el trabajo del ministerio del pastor Omara, diciendo que dio muchos frutos para el reino.
"Trabajó incansablemente por el reino de Dios hasta el día en que dio su último aliento", dijo un colega.
A Omara le sobreviven su esposa y ocho hijos de entre 30 y 10 años.
"Necesitamos oraciones y apoyo financiero para la familia Omara en este momento difícil, y la rápida recuperación de su viuda", dijo un líder de la iglesia a Morning Star.
El asesinato de Omara fue el último de los muchos casos de persecución de cristianos registrados en Uganda.
Como informó CBN News en septiembre, una niña cristiana de 13 años y su hermano de 11 años fueron supuestamente secuestrados por una mujer musulmana radical hace dos años y vendidos a un brujo para un sacrificio ritual. Cientos de niños ugandeses han sido secuestrados y asesinados o mutilados como parte de un próspero negocio de sacrificios humanos en ese país.
En 2017, el corresponsal internacional de CBN News, George Thomas, se unió a detectives encubiertos, policías armados y un pastor que buscaba a un médico brujo acusado de secuestrar y matar a niños.
El sacrificio de niños en Uganda es un problema tan grave y generalizado que el gobierno incluso ha creado un grupo de trabajo contra el sacrificio de niños y la trata de personas.
La constitución de Uganda y otras leyes establecen la libertad religiosa, incluido el derecho a propagar la propia fe y convertirse de una fe a otra. Los musulmanes no representan más del 12 por ciento de la población de Uganda, con altas concentraciones en las áreas orientales del país.
En 2018, Uganda no fue nombrada en la Lista de Vigilancia Mundial de Puertas Abiertas anual de los 50 países principales donde es más peligroso y difícil ser cristiano. Pero sí entró en la lista de los siguientes ocho países donde la persecución es "alta", según World Watch Monitor. Uganda ocupó el puesto 58.