(Foto AP / Thanassis Stavrakis)

Grecia ahora exige a los feligreses que presenten una prueba de vacunación, una prueba de COVID negativa o una prueba de inmunidad natural para asistir a los servicios después de un aumento reciente en los casos de COVID-19. 

La regla, que entró en vigencia el domingo, es parte de una gama más amplia de restricciones que incluye excluir a las personas no vacunadas de los espacios interiores, incluidos restaurantes, cines, museos y gimnasios, incluso si dan negativo para el coronavirus.

Según Politico EU , el primer ministro griego Kyriakos Mitsotakis dijo que su plan era que el país "tuviera una Navidad mejor este año que el año pasado" e instó a los griegos a "vacunar, vacunar, vacunar".

El número de infecciones diarias alcanzó cifras récord en noviembre a pesar de la tasa de vacunación del 62 por ciento del país. 

"Esta es de hecho una pandemia de los no vacunados", dijo. "Grecia está de luto por pérdidas innecesarias porque simplemente no tiene las tasas de vacunación de otros países europeos".

A pesar del impulso para hacer cumplir restricciones más estrictas, el Santo Sínodo dijo en un comunicado que no puede imponer el cumplimiento. 

"Las personas que trabajan o son voluntarias en las Santas Iglesias no tienen la capacidad ni el poder de un bien público como la policía", decía. 

“La posición firme de nuestra Iglesia es que la elección de la vacunación no es una cuestión de buena fe o confesión, sino un objeto de la ciencia médica y un acto de responsabilidad individual y social”, prosiguió. "Cualquier punto de vista opuesto, incluso del clero, no representa a la Iglesia de Grecia, que está oficialmente gobernada y expresada únicamente por el Santo Sínodo".