Los fanáticos y compañeros actores rinden homenaje al legendario actor James Earl Jones, quien falleció el lunes a la edad de 93 años. Jones superó los prejuicios raciales y una tartamudez severa para convertirse en un pionero en el escenario y en la pantalla grande.

Fue uno de los actores más famosos de Estados Unidos, conocido por ser la voz de Darth Vader, El Rey León e incluso el eslogan de la CNN. Ganó dos premios Emmy, un Globo de Oro, dos premios Tony, un Grammy y un Oscar honorario.

En 1993, Jones le contó a Ben Kinchlow de CBN cómo superó su problema infantil con la tartamudez cuando un profesor de secundaria lo desafió a leer un poema que había escrito, frente a la clase.

La tartamudez comenzó después de que la madre de Jones, abandonada por su marido, lo llevó a vivir a la granja de sus padres cerca de Manistee, Michigan, cuando tenía solo 6 años. Sus abuelos lo adoptaron y lo criaron.

"Para mí, el mundo seguro de la infancia se acabó", escribió Jones en su autobiografía, Voices and Silences (Voces y silencios) . "Se suponía que la mudanza de Mississippi a Michigan sería un acontecimiento glorioso. Para mí fue un dolor de corazón y, poco después, empecé a tartamudear".

En un artículo publicado en Guideposts en 1993, Jones explicó  : "Desde los ocho años tuve problemas para hablar. Era tan grave que, siempre que me levantaba en clase para leer, los demás niños se reían entre dientes. Yo siempre me sentaba, con la cara ardiendo de vergüenza". Jones escribió: "No estoy seguro de qué causó mi tartamudez. Tal vez fue un problema emocional. Nací en Arkabutla, Mississippi, y cuando tenía unos cinco años me mudé a vivir con mis abuelos en su granja cerca de Dublin, en el norte de Michigan. Fue traumático pasar de las cálidas y tranquilas costumbres de la zona de los bagres al duro clima del norte, donde la gente parecía tan diferente".

Jones también escribió en ese artículo que, a pesar de haber sido un momento traumático en su vida, Dios utilizó ese importante acontecimiento de otras maneras. “Afortunadamente, mi abuelo era un hombre gentil, un granjero que me enseñó a amar la tierra. Era bajito y tenía una prodigiosa cantidad de energía. Incluso construyó una iglesia para complacer a mi abuela, una ferviente adoradora del Señor. Todo tipo de personas fueron invitadas a nuestra pequeña iglesia: blancos, negros e indios americanos se reunieron en una comunidad no denominacional”. 

Pero su tartamudez persistió y le hacía sentir vergüenza de hablar, por lo que permaneció prácticamente mudo durante muchos años hasta que un profesor de secundaria comprensivo, Donald Crouch, se enteró de que Jones escribía poesía y le exigió que leyera uno de sus poemas en voz alta en clase. Obedeció y finalmente encontró su voz.

Con el tiempo se convirtió en un actor consumado e incluso le pidieron que grabara una narración para el Nuevo Testamento, lo que llamó su "mayor honor", diciendo que lo hizo para el mentor de la infancia que lo había ayudado a superar su tartamudez y quien le había señalado a Dios.

"Y así, cuando me pidieron que grabara el Nuevo Testamento, realmente lo hice para un hombre alto, delgado y de cabello gris que no solo me había ayudado a guiarme hacia el autor de las Escrituras, sino que, como padre de mi voz resucitada, también me había ayudado a encontrar vida abundante", escribió.

La causa de la muerte de James Earl Jones se desconoce actualmente.