En medio del desastre por el huracán Florence, ha surgido fe y generosidad en muchos

En medio del desastre por el huracán Florence, ha surgido fe y generosidad en muchos

09-17-2018

Las secuelas del huracán Florence continúan en una segunda semana con al menos 17 muertos y cientos de miles sin electricidad.

Las consecuencias de la tormenta de lento movimiento son masivas, y está lejos de terminar a medida que se arrastra, arrojando cantidades increíbles de agua en la región.

Ahora degradado a una depresión tropical, los restos del huracán Florence todavía azotan a las Carolinas con lluvias torrenciales.

Norman Bryson, director de servicios de emergencia del condado de Onslow, dijo: "Con lo que estamos lidiando es probablemente el desastre más catastrófico que este condado haya visto en los últimos 50 o 60 años".

La poderosa tormenta y la fuerte lluvia han dejado más de 500,000 personas en la oscuridad y cientos han sido rescatados por las inundaciones.

La ciudad de Wilmington, Carolina del Norte ha sido completamente aislada del resto del estado por las inundaciones.

En medio de la emergencia, ha relucido la fe y la esperanza. Por ejemplo, unos bomberos oraron en la escena donde una madre y su hija de ocho meses murieron cuando un árbol se estrelló en su casa el viernes. El padre herido fue llevado al hospital.

Además, varios ministerios cristianos se encuentran ubicados en las zonas afectadas para brindar ayuda física y espiritual a los damnificados.

Operación Bendición de CBN, está brindando un alivio inmediato a los necesitados, proporcionando agua, alimentos y kits de higiene personal.

Incluso cuando disminuyen las aguas de la inundación, puede haber más inundaciones en camino en algunas áreas. Pero Operación Bendición ya está en la escena, ayudando a cientos de familias.

Un camión de este ministerio viajó hasta New Bern, donde docenas de voluntarios han estado entregando suministros de emergencia, satisfaciendo las necesidades inmediatas de las personas para que puedan comenzar el proceso de limpieza.

Mientras tanto, un segundo equipo de Operación Bendición explora lugares al sur de Raleigh para averiguar dónde puede ayudar el grupo de emergencias.

"Operación Bendición está aquí en Lumberton, Carolina del Norte, para llegar a los residentes que no han recibido ayuda de nadie. Detrás de mí, se ve que la calle Chippewa, se ha inundado por completo. Estamos muy cerca del río.  Además, con estas calles, muchas casas se han inundado. Nos reuniremos con los líderes de la iglesia local para ver cómo Operación Bendición puede brindar algún alivio a estos propietarios".

Por el momento, la mayoría de las personas se quedan en refugios. Necesitan lo básico, y están felices de obtenerlos.

"Les aprecio a todos, CBN. Todos ustedes son los mejores. Gracias", dijo un residente.

La casa de Diedre fue una de las pocas en su vecindario que no se inundó, por lo que fue una de las primeras en ofrecerse como voluntaria en Operación Bendición.

"Operación Bendición ha sido solo eso, una bendición. Verlos entrar, ver cómo cargan los camiones y ver la sonrisa en la cara de todos sabiendo que la ayuda está aquí, ha sido increíble", dijo Diedre.

Con la ayuda de voluntarios y donantes de Operación Bendición, el ministerio continuará proveyendo ayuda a los necesitados.

Otros ministerios comprometidos con la causa son World Vision, Samaritan’s Purse, Mercy Chefs, entre otros.