El "guerrero" pro-vida Jim Sedlak muere a los 78 años

El "guerrero" pro-vida Jim Sedlak muere a los 78 años

01-12-2022
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Jim Sedlak vía American Life League

El defensor de la vida Jim Sedlak pasó su vida "luchando contra los males del aborto y la cultura de la muerte" y, según sus allegados, pasó los últimos minutos de su vida exponiendo el lado oscuro de Planned Parenthood.

El hombre de 78 años falleció el lunes 10 de enero de 2022, antes de terminar un informe que la American Life League publicará próximamente y que expondrá las operaciones del gigante del aborto.

"Cuando trabajé en Planned Parenthood, su mayor amenaza era un humilde hombre llamado Jim Sedlak", explicó la defensora provida y ex directora de una clínica de Planned Parenthood, Abby Johnson. "Les aterrorizaba".

Sedlak fue reconocido como un experto en el movimiento provida. Planned Parenthood Federation of America lo nombró como uno de los luchadores "más activos" contra los programas de educación sexual de Planned Parenthood.

La cofundadora de American Life League, Judie Brown, llama a Sedlak el "enemigo número uno del mal en América".

"Desde el primer momento en que hablé con Jim, no había duda de que era un experto en las formas en que la gente de los movimientos de base podía ser más eficaz en la lucha contra Planned Parenthood. Hablaba por experiencia, y siempre sabía exactamente qué hacer para irritar a los que promovían la cultura de la muerte", dijo Brown.

"Jim era un fiel católico que tenía una increíble devoción y no dirigía con palabras, sino con el ejemplo. Creo que ésta es la principal razón por la que fue tan eficaz en la lucha contra el veneno de Planned Parenthood en nuestro entorno. Planned Parenthood le temía, y con razón", continuó.

El principal trabajo de Sedlak fue mostrar al mundo los "trapos sucios" de Planned Parenthood. Trabajó como director ejecutivo de la American Life League y también fundó STOPP y STOPP International, que se centra en poner al gigante del aborto fuera del negocio.

En diciembre de 2021, Sedlak publicó el "Informe sobre la compensación de los directores ejecutivos de Planned Parenthood en 2020" que arrojó luz sobre la codicia y el racismo inherente en todo Planned Parenthood.

Más provida expone los enormes sueldos de los directores generales de Planned Parenthood, financiados por los contribuyentes, y que los directores generales negros cobran menos.

Según el informe, el gigante del aborto paga a nueve de sus directores generales y a otros seis de sus principales empleados más dinero que 437.000 dólares al año.

"Está claro que ha llegado el momento de que el Congreso de Estados Unidos retire a Planned Parenthood el estatus de 'organización benéfica' y deje de obligar a los contribuyentes estadounidenses a financiar a este parásito aprovechado", dijo Sedlak.

Sedlak tampoco se sorprendió de que la intolerancia racial apareciera en todos los niveles de la organización abortista financiada por los contribuyentes.

Hay una evidente disparidad en la forma en que Planned Parenthood trata a sus ejecutivos de color", observó Sedlak, "y eso permite un entorno organizativo que desprecia y falta de respeto a los líderes que no son blancos". Eso es bastante revelador para una empresa cuyos inicios se admiten en los esfuerzos eugenésicos para evitar que las mujeres negras se reproduzcan".

A Sedlak le sobreviven su esposa, Michaeleen, sus tres hijos mayores y diez nietos.