Benjamin Netanyahu, ex primer ministro israelí y líder del partido Likud, saluda a sus seguidores en Jerusalén el miércoles 2 de noviembre de 2022. (Foto AP/Maya Alleruzzo)

JERUSALÉN, Israel – Después de consultar con los líderes del partido en la Knesset, se espera que el presidente Isaac Herzog comisione oficialmente el domingo al ex primer ministro Benjamin Netanyahu con la tarea de formar el próximo gobierno de Israel.

Herzog concluyó dos días de conversaciones con los líderes de los partidos que despejaron el umbral en las elecciones del 1 de noviembre, consultándolos sobre quién debería obtener el mandato. Netanyahu fue la elección.

El Partido Likud de Netanyahu terminó primero en las elecciones con 32 escaños, y tendrá 28 días para forjar un acuerdo con tres partidos religiosos. Eso le daría 64 escaños en la Knesset, tres más de los necesarios para construir un gobierno.

El segundo al mando del Partido Likud, Yariv Levin, ha estado negociando durante días con los partidos religiosos: sionismo religioso, Shas y Judaísmo Unido de la Torá (UTJ).

El propio Netanyahu se involucrará cada vez más en el polémico proceso de decidir quién obtiene los codiciados puestos en el gabinete. Tendrá que hacer un acto de malabarismo para satisfacer tanto a los miembros de su propio partido que se mantuvieron leales a él durante su tiempo como líder de la oposición, como a los advenedizos partidos religiosos que tuvieron su mejor desempeño electoral.

Se informa que el presidente sionista religioso, Bezalel Smotrich, está considerando el puesto de ministro de defensa, uno de los puestos más altos del gobierno, y el líder del Shas, Arye Deri, podría estar en línea para la cartera clave de ministro de finanzas.

Netanyahu tiene la esperanza de poder llegar a un acuerdo antes del 15 de noviembre, que es el día en que se reunirá la próxima Knesset. Eso sería mucho más rápido que el proceso de formación de coaliciones en las cuatro elecciones anteriores, que se prolongó durante semanas.

Mientras tanto, Yair Lapid, el actual primer ministro, insta a los partidos de oposición al próximo gobierno a permanecer unidos. “Estamos embarcados en una lucha parlamentaria, legal y cívica, y sobre todo una lucha fatídica por el futuro del país”, escribió. “La energía no debe desperdiciarse en disputas internas. Si queremos detener la locura, la la oposición necesita trabajar junta en total coordinación”.