Fotografía: AP/Eraldo Peres

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, acusó el viernes a la Corte Suprema de su país de "legislar" desde que se votó para hacer de la homofobia fuera un crimen como el racismo y sugirió que era necesario que existiera una figura evangélica entre los magistrados.

"Con todo el respeto al Supremo Tribunal Federal pregunto si existe entre los 11 jueces supremos alguien evangelista, un cristiano asumido. No me digan que quiero mezclar religión con el Poder Judicial. O tenemos religión o no tenemos. Y hay que respetar a todos. ¿No llegó el momento de tener un ministro evangelista en el supremo tribunal?", se preguntó Bolsonaro. Lo hizo al visitar un templo evangelista de la Asamblea de Dios, en Goiania, capital del estado de Goias.

Pronto en Brasil habrá puestos vacantes para la Corte Suprema. Diferentes medios aseguran que uno de los postulados podría ser el ministro de Justicia, el ex juez Sergio Moro, quién ya Bolsonaro habría mencionado como una opción

Los grupos eclesiásticos conservadores han liderado la resistencia a las medidas a favor de los LGBT y han contribuido a la victoria de Bolsonaro en las últimas elecciones presidenciales.

A principios de este mes, la mayoría de los jueces de los tribunales superiores dictaminaron que la homofobia debería encuadrarse dentro de la ley de racismo hasta que el Congreso apruebe una legislación específica. Argumentaron que la decisión consistía en abordar una omisión que había dejado a la comunidad LGBT legalmente desprotegida.

La decisión final se debe entregar el 5 de junio después de que los jueces restantes que aún no han votado tomen sus decisiones, pero el resultado no se modificará.