Los cristianos turcos están enfrentando una creciente persecución por parte del presidente islámico de la nación.
El presidente Recep Tayyip Erdoğan confiscó otras 50 iglesias siríacas, entre ellas el monasterio de Mor Gabriel, de 1.600 años de antigüedad. El siríaco es un dialecto del arameo usado durante el primer milenio a través de Oriente Medio y Asia.
La reciente incautación de Erdogan, bajo los auspicios de la Dirección Turca de Asuntos Religiosos (Diyanet), tuvo lugar en la provincia de Mardin, informó Word Press.
Según el informe, la gobernación de Mardin fue obligada a transferir sus iglesias, monasterios, cementerios y otros de los activos de la comunidad siriaca al tesoro nacional de Turquía, que luego transfirió la propiedad al Diyanet.
Entre las incautaciones del estado está el histórico Monasterio de Mor Gabriel, uno de los centros religiosos más antiguos del mundo, que data del siglo IV d.C.
Un llamamiento para detener la transferencia de unos 30 registros de títulos de propiedad de la Fundación del Monasterio Mor Gabriel fue rechazado.
La constante invasión de Erdogan a los derechos religiosos de todas las minorías en Turquía se ha intensificado desde que un referéndum nacional le otorgó un poder casi exclusivo sobre el país.
En 2016, Erdogan tomó el control de seis iglesias, hogar de congregaciones católicas, protestantes y ortodoxas, en Diyarbakir. Se dice que una de las iglesias tenía más de 1.700 años.
"El gobierno no se apoderó de estos bienes para protegerlos", dijo Ahmet Guvener, pastor de la Iglesia Protestante de Diyarbakir. Lo hicieron para adquirirlos.
Mientras tanto, The New York Times informa sobre una marcha de protesta en la que participan miles de personas encabezadas por Kemal Kilicdaroglu, líder del principal partido de oposición de Turquía.
Kilicdaroglu, que entiende que, en la Turquía de hoy, él y otros podrían ser llevados a la cárcel, dijo: "Si tenemos que pagar un precio, lo pagaremos".
Los manifestantes protestan por el arresto y encarcelamiento de unos 50.000 ciudadanos turcos, entre ellos 240 periodistas, más de una docena de legisladores, además de académicos, maestros y funcionarios.
La marcha, que comenzó hace dos semanas en la capital de Ankara, fue iniciada por el Partido Popular Republicano (CHP). Los organizadores esperan que miles más se unan a la última etapa de la marcha de protesta de 250 millas, programada para terminar el próximo domingo en Estambul.