Los cuerpos de 21 cristianos coptos que fueron decapitados por ISIS fueron hallados en una fosa común en Libia, según el ministerio del interior de Libia.

Los hombres habían sido asesinados hace más de dos años en una playa cerca de Trípoli, informó la Agence French Presse. En febrero de 2015, ISIS había publicado un video en línea de las decapitaciones, que provocó ataques aéreos desde Egipto contra las unidades de ISIS en Libia.

Los combatientes de ISIS habían secuestrado a los cristianos en incidentes separados en Libia desde diciembre de 2014 hasta enero de 2015, informó The Christian Post.

"Las cabezas están separadas de los cuerpos con trajes de color naranja, las manos atadas a la espalda con alambre de plástico", dijo la unidad del Ministerio del Interior de Libia por la lucha contra el crimen organizado en la ciudad de Misurata.

Las autoridades se enteraron de la fosa común después de que los presos de ISIS confesaron los asesinatos.

Se determinó que veinte de los cuerpos eran de ascendencia egipcia, mientras que se descubrió que un cuerpo tenía una nacionalidad africana desconocida. Los restos han sido transferidos a Misurata para el examen forense.

Funcionarios egipcios han sido notificados del hallazgo de los restos, que serán devueltos a Egipto.

El mes pasado, un tribunal egipcio condenó a muerte a siete personas por vínculos con unidades de ISIS en el noroeste de Egipto.

A principios de este año, International Christian Concern informó que los familiares de los asesinados estaban orgullosos de que sus familiares se enfrentaron a ISIS en el nombre de Cristo.

Una mujer dijo que su esposo "mantuvo la fe y fue martirizado por Cristo".

"Su fe fue muy fuerte", dijo. "Estoy orgulloso de él. Él levantó nuestra cabeza y nos honró a nosotros y a todos los cristianos".