La huella imborrable que dejan los pastores fallecidos en accidente aéreo en Cuba

La huella imborrable que dejan los pastores fallecidos en accidente aéreo en Cuba

05-29-2018
5790951230001

El trágico hecho ocurrido el pasado viernes 18 de mayo, en el que fallecieron más de 100 personas, dejó tras su paso dolor en el corazón de toda la isla y en especial el de la Iglesia cubana. Esto, debido a que al menos 18 pastores perdieron sus vidas, pues se encontraban camino a casa después de salir de una Conferencia Nacional de tres días en el Seminario Nazareno en La Habana.

“Inmediatamente de la explosión, yo supe la noticia rápido, en mi cuerpo todas las coyunturas se aflojaron. Luego comenzaron las llamadas, llamaban de Holguín, yo no sabía que decir. Hasta el día de hoy, lo que yo experimento, es una sensación de vacío”, relató a Mundo Cristiano, el reverendo Pedro Luis Urgelles, del Seminario Teológico Nazareno Cubano.

La Conferencia Nacional de Matrimonios Pastorales y Líderes, tuvo la peculiaridad de poder unir a todo el cuerpo pastoral de la Iglesia el Nazareno después de 5 años, con una asistencia de 125 matrimonios pastorales, entre ellos los 10 pastores y esposas fallecidos, quienes dejaron una huella imborrable en las personas que convivieron con ellos sus últimos momentos.

“Eran unos hermanos que siempre encendían la chispa en cuanto a la alabanza y algo que me llama la atención y recuerdo es la noche antes de su partida, ellos cantaban ‘Yo me voy con Él’ y ellos no podían seguro imaginar que a pocas horas iban a estar en la presencia del Señor”, comentó Ángel Figueredo, vicerrector administrativo del Seminario Teológico Nazareno Cubano.

“(Tengo) recuerdos maravillosos de Yurisel y de Ronni. En el año 2011, ella estaba llevando el curso de maestría y coincidió que fue el proceso de enfermedad de nuestro hijo, y ella se hizo cargo de todo, se levantaba de madrugada a orar, a veces ni dormía. Yo la recuerdo no solo como una hermana de la iglesia, sino, como parte de mi familia”, precisó Yubanni Gómez, pastora de la Iglesia El Nazareno en Punta Brava.

“Tuve una relación muy cercana con el reverendo Alain Pupo, él se había comprado una moto y el tubo de escape le había quemado una parte del pie. Entonces, cuando llegó a La Habana, me dijo: ‘Me hace falta que me des tus zapatos porque los que yo traje me molestan’. Yo si algún día llego a usar esos zapatos nuevamente, será un recuerdo permanente de ese tiempo”, comentó Urgelles.

Un gran legado dejó estos pastores, padres, hijos y amigos, quienes serán recordados por siempre como héroes de la fe.  

“A los hijos que quedan huérfanos, a las familias que quedan sin sus hijos, sin su padre… que recuerden con mucho cariño y aprecio las enseñanzas, el legado que sus padres les dejaron como hombres y mujeres de fe, ellos no estaban en un lugar que estaban disgustados ni estaban haciendo algo que no querían hacer, estaban felices, estaban disfrutando de un evento muy importante, el cual ellos anhelaban. Como dice la Palabra, ‘aunque padre y madre me dejaren Jehová con todo me recogerá’”, concluyó el reverendo Leonel López, superintendente nacional de la Iglesia del Nazareno en Cuba.