Hombre se reencuentra con su familia después que ISIS la secuestrara

Hombre se reencuentra con su familia después que ISIS la secuestrara

05-10-2017

Estancado en medio de la lucha en curso entre ISIS y el ejército nacional iraquí, la población civil iraquí conoce el trauma emocional y físico de la guerra de primera mano.

A diario, medios de comunicación internacionales, misioneros, amigos y familiares han expresado su preocupación por los prisioneros de ISIS en el norte de Irak. Un ciudadano iraquí, Nezar, cuyo apellido está siendo retenido por razones de seguridad, se ha unido a muchos en sus gritos de ayuda.

Nezar, un cristiano yazidi, es un esposo y padre que vive en un pueblo fuera de la ciudad de Sinjar, a unas dos horas en carro de Mosul. Hace varios meses, se encontró con el misionero cristiano y fundador de Free Burma Rangers (FBR), David Eubank.

Eubank es un estadounidense que ha estado trabajando con los militares iraquíes para luchar contra ISIS y apoyar a los civiles suministrándoles comida, asistencia médica y cuidado pastoral.

En una entrevista anterior con Faithwire, Eubank compartió que Dios lo llamó para servir en el norte de Irak. Durante uno de sus viajes misioneros a los suburbios de Mosul, el misionero conoció a Nezar.

En el otoño de 2016, Eubank escribió sobre el emotivo encuentro entre él y Nezar en su página web.

Eubank recuerda cómo lloró y oró por la libertad de la esposa y los dos hijos de Nezar cuando, en agosto de 2014, escuchó que los tres habían sido capturados por ISIS.

El pasado mes de abril, meses después de que Eubank y Nezar se conocieran, Eubank recibió noticias de Nezar de que era capaz de obtener suficientes fondos para pagar a ISIS por la liberación de su familia. Esta enorme bendición movió a Eubank tanto que viajó a la montaña de Sinjar para documentar el encuentro de la familia.

Photo: Free Burma Rangers/David Eubank

Cuando Eubank se reunió con la familia, se enteró de que el hijo de 5 años de Nezar quedó lesionado de una pierna. Esto fue provocado por los combatientes de ISIS, durante el tiempo de la familia en cautiverio.

La familia ahora vive en un campamento de desplazamiento interno cerca de Dohuk, Kurdistán en el norte de Irak. En este punto, no tienen planes de regresar a su pueblo.

En 2014, el mismo año en que la familia de Nezar fue capturada, miles de yazidis fueron asesinados, aprehendidos o obligados a convertirse al Islam, informó Al Jazeera el año pasado.

El informe añade que "ISIS mató aldeas enteras, asesinando al menos a 5.000 hombres y niños yazidíes y secuestrando a 7.000 mujeres y niñas como esclavas sexuales".

"Fue una campaña metódica de asesinatos, violaciones y esclavitud que los investigadores de la ONU dijeron en junio equivalían a genocidio".