Una tribu llamada Massai se llenó de gozo y fe, luego que hombres y mujeres recibieran a Cristo como su Señor y Salvador al bautizarse.
“Es un milagro. Es inexplicable el poder ser usado por el padre”, expresó el pastor.
La comunidad se preparó durante un tiempo, recibiendo prédicas, testimonios y la lectura de la Biblia.
Según Eduardo, coordinador de la Alianza Ministerial Global, la primera vez que alguien escuchó del evangelio en la tribu fue en agosto de este año.
Es importante mencionar que la iglesia en Tanzania enfrenta persecuciones y ataques en contra de los cristianos, ya que algunos reconocen que existe violencia, falta de formación bíblica y grandes divisiones internas.
La organización misionera destaca que cada acción que realizan para difundir el evangelio transforma vidas y culturas.

