Milagro, tras milagro, tras milagro... Eso es lo que sucede con regularidad en un lugar con vista a la ciudad de Dallas, Texas. Es llamado el Monte de Oración. Y durante los últimos treinta años las personas han venido a este retirado lugar en busca de su sanidad.
A la edad de 6 años, Viviana Ruíz fue diagnosticada con leucemia.
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"No éramos salvos. Solo íbamos por la vida. No sabíamos lo que estaba pasando. Yo estaba en el primer grado cuando me diagnosticaron y como puede imaginar, nuestra vida decayó por completo", dijo Ruíz.
Luego vino la quimioterapia... Viviana apenas podía soportar el dolor.
"Un día después de mi tratamiento me sentía muy, muy enferma. Ya habían hecho todo lo que podían hacer. Tú te sientes tan enferma por el cáncer y después por la quimioterapia... Eso mata todo, no solo el cáncer... El médico dijo: No hay nada más que podamos hacer", relató Ruíz.
Al mismo tiempo una familia amiga convenció a la mamá de Viviana de llevarla al Monte de Oración.
"Ella me trajo. Ella se sentó en el lado de las bancas y yo estaba dormida y mi mamá dice que toda la iglesia se detuvo. Y el pastor Robert se detuvo. La congregación vino a mí e impusieron sus manos sobre mí y oraron. Yo estuve dormida durante todo ese tiempo y cuando desperté... mi mamá dice que había mejorado por completo, era una niña nueva, nada me estaba afectando", indicó Ruíz.
Conversión tras milagro
Gracias a ese "milagro en el monte" la familia entera finalmente llegaría a conocer a Cristo.
Los milagros ocurren ahí en forma regular.
El pastor Robert Summers y su esposa Joanne encontraron este Monte de Oración hace casi 30 años. Dicen que Dios les dijo que compraran el terreno y construyeran un centro de oración en la cumbre. Desde entonces han añadido un jardín, salas de oración y una plataforma de oración con vista a la ciudad.
En Dallas donde todo es grande, la gente está subiendo a la montaña más grande para buscar a Dios y él les responde de formas milagrosas.
La palabra montaña puede ser un poco exagerada. El pico se levanta sobre los 900 pies, pero cuando llegas a la cima, las vistas son espectaculares.
"Tenemos un linaje de oración en nuestra familias, que va hasta nuestros padres, abuelos, y sabemos la importancia de la oración y lo que la oración puede hacer para cambiar las cosas", aseveró Joanne Summers, fundador del Monte de Oración.
Evangelio por doquier...
En 1990 Joanne y su madre fueron destacadas en una historia del Club 700 sobre un ministerio de intercesión. Cuenta la milagrosa historia de un grupo de sobrevivientes de la Segunda Guerra Mundial.
Las mujeres intercedieron por 52 hombres de la congregación y los 52 hombres regresaron a salvo.
Ella tomó esa experiencia y ahora enseña eso a un nuevo grupo de intercesores, incluyendo a políticos...
"Los últimos 20 años que hemos estado aquí en Dallas cada alcalde, o quien quiere ser alcalde, viene aquí y nos pide que oremos con ellos", comentó el pastor Robert Summers, fundador del Monte de Oración.
Es también para los jóvenes de la ciudad.
"Lo que no pudimos ver cuando estábamos en la Universidad Bautista de Dallas es que Dios nos estaba formando en la estructura de esta montaña", dijo Paul Nelson, de la Pastoral juvenil Mountain Creek.
"A medida que nos unimos a diferentes denominaciones, diferentes grupos étnicos y estamos de acuerdo en el lugar de la oración, él libera su poder", comentó Britainie Nelson, de la Pastoral juvenil Mountain Creek.
Solo pregúntele a Viviana. Ella tiene 20 años ahora, y da el crédito a Dios y a la nueva generación de intercesores.
"Yo fui curada. ¡Aleluya! Ya sabes, por su llaga fui curada. Estoy muy agradecida por los médicos y las personas que ayudaron y todo. Y por todo lo que han hecho, fueron más que un apoyo. Pero yo no estaría aquí sin el Señor. Constantemente la iglesia le decía a mi mamá, ella no morirá, cree en que él lo hará. Ahora estoy aquí en exalto a Dios", concluyó Ruíz.
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