Algunos de los líderes evangélicos más destacados de los Estados Unidos realizaron el jueves por la noche una actividad en línea por el Día Nacional de Oración del país.
Cada año, las personas se reúnen en todo Estados Unidos en más de 60,000 eventos locales para orar por el país.
Sin embargo, este año todo fue diferente debido a la situación del COVID-19. Aunque se creía que la medida del distanciamiento social podría estropear las reuniones de oración, fue todo lo contrario al lograr reunir a millones de personas en un solo evento, pero en línea.
Ciertos líderes evangélicos reconocidos en el país e internacionalmente se decidieron unir a esta actividad que en definitiva marcó la historia del Día Nacional de Oración.
El nieto del evangelista Billy Graham, Will Graham, fue uno de los presentadores oficiales de la actividad, junto a Kathy Branzell, la presidenta del Equipo de Trabajo del Día Nacional de Oración.
“Cuando entré en este rol como presidente del Día Nacional de Oración, una de las primeras personas que Dios puso en mi corazón fue nuestro co-presentador del Día Nacional de Oración para el 2020. Yo no puedo pensar en otra familia que ha compartido la gloria y el Evangelio de Jesús más que la familia Graham. Y por eso es mi honor introducirles a él, mi amigo Will Graham”, dijo Branzell.
“Bueno gracias, Kathy por este gran honor de orar por nuestro país en este día especial. Orar es fundamental, es vital, es una bendición estar aquí ayuda a dirigir a nuestra nación en este tiempo de oración”, comentó Graham.
El evento del Día Nacional de Oración contó con tiempos de adoración a cargo del reconocido cantante Michael W. Smith.
“Me siento honrado de ser parte de este tiempo. Necesitamos orar. Conforme se hacen estas oraciones, te estoy retando, si estás de acuerdo, que oremos juntos. Incluso en tu carro, en tu oficina, en tu hogar. Incluso yo dirigiendo estas canciones, canta conmigo a todo pulmón, en tu carro, donde sea. Solo levanta tu voz, ora y canta. Este es un día monumental. Creo que los cielos cambiarán”, dijo Smith.
Uno de los momentos más inspiradores del evento fue cuando se enlazaron varios líderes evangélicos y comenzaron a clamar a Dios a una sola voz.
“Como has tenido el control en cada momento de cada momento que haya existido, padre, siempre tendrás el control. Tú tienes el control y nos estás moviendo hacia la justicia. En este momento y en esta temporada y saldremos de esta pandemia con más. Número uno, estaremos con más orientación sobrenatural y cubriendo nuestra tierra. Número dos, saldremos más saludables no solo de la pandemia sino también en general saludables”.
El hijo del evangelista Luis Palau, Andrés Palau, también formó parte de esta actividad.
“Viví 27 años sin esperanza y sin propósito vagando sin rumbo hasta que escuché las buenas noticias y gracias a las oraciones fieles de mis padres, por la gran misericordia de Dios, me permitió escucharlas, recibirlas y ser transformado”, comentó Palau.
Por su parte, el Dr. Pat Robertson, fundador de The Christian Broadcasting Network, ministerio al que pertenece Mundo Cristiano, le recordó a la audiencia que Dios es nuestro pastor y no hay por qué temer. Asimismo, dirigió una breve oración:
“No temeremos, el Señor es mi pastor, aunque nosotros caminemos en el valle de la sombra de muerte, no temeré al mal, porque estás conmigo. Señor, conforta a las personas que están en primera línea. Alienta a tus santos y que el poder de Dios traiga avivamiento a esta nación y a todo el mundo”, oró el Dr. Robertson.
El pastor Robert Morris, de la iglesia Gateway, también dirigió un clamor por Estados Unidos.
“Padre, estamos reuniendo a un pueblo en nuestra nación y te pedimos que escuches del cielo según tu palabra, que sanes nuestra tierra, que perdones nuestros pecados, y te pedimos Señor, que dejes que la gloria del Señor cubra la tierra como las aguas cubren el mar”, clamó el pastor Morris.
Otra oración que destacar fue la que dirigió el pastor Rick Warren, mejor conocido por su libro “Una Vida con Propósito”.
“Señor, sobre todo oramos para que nuestras vidas te traigan gloria. Que te glorifiquemos amando y unificándonos y siendo armonía con otros creyentes. Siendo testigos y luz para el mundo. Que vean nuestras buenas obras. Confiando en ti y pidiendo con fe esperando que hagas milagros”.
El evento del Día Nacional de Oración tuvo una duración de más de 2 horas y contó con la participación otros líderes evangélicos más.
Este tipo de celebraciones, pero de manera presencial, fueron aprobadas originalmente por el Congreso y reconocidas legalmente por el presidente Truman en 1952. Esa ley fue revisada por el Congreso y firmada por el presidente Ronald Reagan en 1988, nombrando el primer jueves de mayo como el Día Nacional de Oración.