Asegura que Dios lo sanó, luego de 71 días hospitalizado por COVID-19

Asegura que Dios lo sanó, luego de 71 días hospitalizado por COVID-19

11-23-2020
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James Story, sobreviviente de COVID-19. (Crédito de la imagen: CBN)

“La primera vez que escuché sobre COVID, estábamos en una reunión de personal en la iglesia, en la Primera Iglesia Metodista Unida de Gallatin en Gallatin, Tennessee. La administración de la oficina del obispo había enviado algunas recomendaciones sobre cómo prepararnos para esta pandemia que estábamos a punto de experimentar”, dijo James Story, un profesor de música retirado de la escuela secundaria y la universidad en Tennessee, que comenzó a sentirse enfermo en marzo de 2020.

“Empecé a tener escalofríos y fiebre, fui a urgencias y me enviaron a casa. Pero durante el fin de semana había empeorado. Fui a mi PC (atención primaria) habitual y me hizo un análisis de sangre. Por supuesto, no había ningún síntoma en ese momento, para distinguir que 'tienes COVID en este momento'", continuó.

Su amiga Brenda Reed dijo: “Me llamó y me preguntó si podía llevarlo al hospital, a la sala de emergencias y a los médicos. Su análisis de sangre había regresado y los médicos querían que fuera a la sala de emergencias. No sabíamos qué iba a pasar. Recibía llamadas todos los días y veía lo que estaba pasando con sus signos vitales y todo lo que le estaba pasando. Así que sí, fue aterrador".

“Me había vuelto séptico. Había comenzado la diálisis porque mis riñones estaban fallando y desde allí todo fue cuesta abajo”, dijo James.

James pasó varias semanas perdiendo la conciencia a medida que su condición empeoraba. La enfermera practicante Laura Youngman dice: “Estuvo conectado a un ventilador durante quince días. Necesitó iniciar hemodiálisis porque sus riñones habían dejado de funcionar. Así que su caso se habría considerado como un caso bastante grave de COVID-19".

Los amigos de James crearon una página de Facebook y comenzaron una vigilia de oración por él. Mientras tanto, James decidió aprovechar este tiempo para crecer espiritualmente. “Aproveché el tiempo que tuve para meditar y leer las Escrituras y acercarme más a Dios”, dijo a CBN.

En un momento, James tuvo una visión.

“Me sentí como si estuviera en una tumba y estaba tratando de levantarme hacia la luz del sol. Y una vez que llegué a la cima, sentí como si vi el rostro de Dios y él estaba extendiendo su mano hacia mí y todo lo que podía hacer era postrarme y adorar”, recordó. "Mi familia, mis amigos, los miembros de mi iglesia y personas de todo el mundo estaban orando por mí".

“Hubo unos días en los que nos preguntamos si íbamos a poder desconectarlo del respirador o si su familia iba a tener que tomar una decisión sobre considerar una traqueotomía, una sonda de alimentación y cosas por el estilo”, Youngman explicó.

Varios meses antes, James había escrito una canción para su hermana fallecida que, según él, realmente ayudó a mantenerlo.

“Nuestro pastor James Johnson había usado nuestra declaración de misión 'Love Now' o 'Ama Ahora'. Amemos no solo con palabras y hechos, sino también con la verdad y la acción’. Así que me senté al piano y, usando la declaración de misión de ‘Ama Ahora’, la canción se escribió sola", dijo James.

“Hubo momentos en los que estuve luchando por no querer que me quitaran el ventilador. Pero durante una serie de días, esa canción estaba sonando, finalmente me calmé y pudieron quitar la ventilación. ¡Cómo pude haber sabido que esa canción escrita para mi hermana sería parte de la curación milagrosa para mí!"

James comenzó a mejorar. Le quitaron el ventilador, sus riñones empezaron a funcionar mejor y lo trasladaron a otra instalación. En total, estuvo hospitalizado durante 71 días.

"Realmente creo que la oración fue parte de eso", señaló Brenda Reed. "Todos los miércoles por la noche lo hacíamos a las 7 en punto porque ese era nuestro tiempo de práctica del coro. Así que sí, creo que realmente fue parte de eso, de su curación".

Desde que James fue dado de alta del hospital Hendersonville Tri-Star, se ha recuperado casi por completo. "Estoy abrumado por la alegría de su recuperación", agrega Youngman. “Pudo haber muerto. Y creo que Dios lo perdonó, y es simplemente una maravillosa historia de éxito, ya sabes, para su fe, y también para la excelente atención médica que recibió".

Reed agrega: "Cuando salimos del hospital, había un grupo de miembros del coro y algunos de sus amigos que se habían reunido y estaban cantando 'Oh Happy Day'. Así que creo que no podría haber una canción más apropiada para ese día, porque fue un día feliz".

James dice: “No solo me sucedió un milagro, hay un milagro dentro de cada uno de nosotros si buscamos y encontramos. Sé que fue Su gracia y poder sanador lo que me dio una segunda oportunidad. No me considero afortunado. Pero me considero bendecido”.