La administración actual de Estados Unidos recibió fuertes críticas por la declaración del Viernes Santo del presidente Joe Biden en la que pedía que "todos los estadounidenses se unan a nosotros para enaltecer las vidas y las voces de las personas transgénero en toda nuestra nación y trabajar para eliminar la violencia y la discriminación basadas en la identidad de género".

El "Día de la Visibilidad" para las personas transgénero fue el domingo 31 de marzo, que coincidió este año con las celebraciones de la Pascua de la resurrección de Jesús.

La declaración provocó una protesta inmediata de los líderes cristianos tanto en el mundo evangélico como de miembros del mismo gobierno.

El director ejecutivo de Samaritan's Purse, Franklin Graham, publicó un mensaje el sábado en X  , que decía en parte: "En el día más importante del calendario cristiano, cuando la Iglesia en todo el mundo celebra la resurrección de Jesucristo, quien murió y derramó su sangre por los pecados de la humanidad. La administración Biden aprovecha esta oportunidad para hacer alarde del pecado, glorificar el pecado y celebrar el pecado".

El columnista y autor judío mesiánico Michael Brown escribió: "Este no es un anuncio inoportuno. Ni siquiera es una bofetada en la cara. Es una patada debajo del cinturón acompañada de una risa y burlas. Es tan insultante como perverso, no importa cuánto nos preocupemos por nuestros amigos y colegas identificados como trans y queramos que experimenten plenitud y libertad en el Señor".

El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, dijo en las redes sociales que la Casa Blanca "traicionó el principio central de la Pascua". Calificó la decisión de “escandalosa y aborrecible”.

Un portavoz de la campaña de Trump dijo que la administración debe "una disculpa a los millones de católicos y cristianos en todo Estados Unidos que creen que (el domingo) es para una sola celebración: la resurrección de Jesucristo".

El portavoz de la Casa Blanca, Andrew Bates, respondió diciendo que los críticos “buscan dividir y debilitar a nuestro país con una retórica cruel, odiosa y deshonesta”. Añadió: "Como cristiano que celebra la Pascua en familia, el presidente Biden defiende unir a las personas y defender la dignidad y las libertades de todos los estadounidenses".