Cuando los alumnos de Virginia vuelvan a las aulas el año que viene, tendrán que dejar algo atrás: sus teléfonos inteligentes.

El gobernador Glenn Youngkin ha ordenado que las escuelas públicas de todo el estado estén libres de teléfonos móviles. Dice que el objetivo es "promover un entorno educativo más sano y centrado donde cada niño sea libre de aprender".

Todas las escuelas de Virginia deberán implementar políticas de no uso de teléfonos celulares para enero de 2025.

"Creo que es una idea fantástica y espero que veamos más distritos escolares en todo el país seguir su ejemplo", dijo Melissa Henson, del Consejo de Padres de Televisión y Medios, a CBN News.

Virginia es uno de los primeros estados en implementar una prohibición de los teléfonos celulares. Florida fue pionera en prohibir los teléfonos inteligentes en las aulas, seguida por restricciones escolares en Indiana y Ohio. La ciudad de Los Ángeles también aprobó restricciones a los teléfonos celulares en las aulas el mes pasado. Y la ciudad de Nueva York está considerando una política similar.

Henson dice que es una gran idea reducir el tiempo que los niños pasan con los teléfonos inteligentes en general.

"Lo que hemos visto no son solo desafíos que enfrenta la salud mental de nuestros niños, desafíos debido a su acceso constante a los teléfonos celulares y las redes sociales durante todo el día", dice, señalando problemas graves como el acoso cibernético, la ansiedad, la depresión y la ideación suicida entre los niños.

Ella dice que reducir o desconectar por completo la tecnología sería un gran beneficio para muchos niños.

"Los teléfonos plegables son una mejor alternativa porque no se ve el mismo tipo de ansiedad e hiperconciencia de las notificaciones y demás que tienen los niños cuando tienen teléfonos inteligentes", dice Henson.

"Pero lo mejor de todo es que, cuando éramos niños, nuestros padres no tenían acceso constante a nosotros. Y Jonathan Haidt publicó este libro hace un par de meses, The Anxious Generation (La generación ansiosa), y plantea que es esta combinación de estar sobreprotegidos del mundo real y desprotegidos en línea lo que está causando todos estos problemas para nuestros hijos".

Henson dice que es hora de que los padres dejen de lado la "crianza helicóptero" y les den más libertad para desenvolverse en el mundo real.