Un ex psíquico que pasó décadas inmerso en lo oculto advierte sobre la glorificación del mal que a menudo acompaña la temporada de Halloween, explicando los peligros de utilizar la Ouija, las cartas del tarot y otras herramientas de adivinación.

“Soy una ex psíquica y estoy notando que… las herramientas de adivinación, como la ouija y las cartas del tarot, se comercializan más en la temporada de Halloween”, dijo Nizza. “En las fiestas hay lectores de cartas del tarot. Puedes ver esto en Home Goods, en CVS. Tus hijos van a estas tiendas, Five Below, y están glorificando las herramientas de adivinación, haciéndolas parecer divertidas y que no son gran cosa”.

La ex psíquica dijo que es difícil no ver la conexión entre la prevalencia de estas herramientas y su mayor uso y promoción en torno a Halloween.

“Es interesante cómo coincide con la temporada de Halloween, ¿no?”, dijo. “Hay algo demoníaco allí”.

Escuche a Nizza compartir sus advertencias y su historia:

Nizza explicó específicamente lo que abarca la adivinación, describiendo la práctica como “entrar en la creación para extraer un significado oculto sobre algo, de información sobrenaturalmente fuera de la voluntad y los límites de Dios”.

Esto puede incluir las cartas del tarot antes mencionadas, tableros Ouija o incluso mirar las estrellas, la luna o los cuerpos celestes para intentar discernir la sabiduría y el futuro.

Nizza, que tiene un popular canal de YouTube y un podcast, “ Ex-Psychic Saved ”, ha compartido habitualmente su experiencia de encontrarse con lo demoníaco cuando era niña y convertirse en una psíquica profesional.

“Cuando tenía 12 años, tuve dos ataques psíquicos”, dijo. “Y un ataque psíquico, según mi propia definición, es cuando recibes información psíquicamente”.

Por esa misma época, Nizza tuvo su primera lectura de cartas del tarot, que al principio le pareció “inocua”, aunque ahora cree que es una “práctica satánica” y una herramienta de adivinación que puede llevar a las personas por caminos espirituales oscuros y peligrosos. Esa, por desgracia, fue exactamente su experiencia.

“Pero lo que parecía inocuo… terminó siendo una adictiva y horrible madriguera de destrucción”, dijo. “Y esa era la puerta de entrada. [Yo] siempre digo que hay una puerta de entrada a lo demoníaco, ya sean cartas del tarot, tablas de ouija, horóscopos, lo que sea”.

Después de seguir ese camino, Nizza se encontró cada vez más haciendo lecturas y explorando herramientas como la adivinación, la numerología, la astrología y otras prácticas.

“Usé cristales para equilibrar los chakras”, dijo. “Terminé haciendo escritura automática y, finalmente, terminé como médium psíquica, creyendo que estaba escuchando a personas fallecidas [que] querían hacer llegar sus mensajes a sus seres queridos que aún estaban vivos”.

Nizza continuó: “Creía que estaba ayudando a la gente. Creía que era un don de Dios que debía utilizar para ayudar a la gente que sufría”.

Dijo que una de las facetas de su experiencia que la convenció inicialmente de continuar durante años en el ocultismo fue que los demonios que invocaba se aparecían como seres queridos fallecidos de sus clientes. Esto también les daba una falsa confianza a quienes iban a verla.

“A veces los veía y esa era mi manera de describirlos”, dijo. “Quizás veía a quien creía que era su mamá: ‘Oh, mamá está aquí. Tiene el pelo rojo’… Y podía ver al demonio, porque eso es lo que es, haciéndose pasar por mamá”.

Finalmente, Nizza se convirtió al cristianismo y aprendió que no es posible hablar con los muertos, pues se dio cuenta de que la habían engañado todo el tiempo. Escuche el podcast para conocer el viaje completo.

Finalmente, Nizza dejó a la gente una advertencia importante en medio de la temporada de Halloween.

“Mi mayor advertencia sería… cuando haces cosas diabólicas, obtendrás resultados diabólicos. Obtendrás resultados diabólicos”, dijo. “Satanás se disfraza de ángel de luz, así que lo que crees que es divertido, lo que crees que es inocente, en realidad es una herramienta del diablo, un juego del diablo. No es un juego con el que se pueda jugar”.