Tras el actual conflicto en la frontera de Gaza, está floreciendo una alentadora alianza entre organizaciones judías y cristianas para proporcionar consuelo y refugio a los israelíes obligados a huir de sus hogares. Desde el 7 de octubre, la Fundación Génesis 123, fundada por Jonathan Feldstein como puente entre judíos y cristianos en Israel, ha estado al frente de este esfuerzo de colaboración.

Feldstein, reconociendo el trauma duradero infligido a los evacuados, subraya la importancia del apoyo colectivo. "Se trata de un trauma que perdurará el resto de sus vidas, las de sus hijos y las de sus nietos", afirma.

Para aliviar la carga de esta experiencia traumática, grupos cristianos y judíos trabajan juntos, cubriendo los gastos de hotel de los evacuados y organizando proyectos, sobre todo para los niños. Feldstein señala: "Los hemos alojado en este hotel, y esta noche vamos a hacer una hermosa barbacoa para ellos junto con un taller en el que los niños están haciendo arreglos florales para entrar en Shabat".

Feldstein explica cómo los niños han quedado traumatizados: "Si estás en una comunidad que avisa con 15 segundos de antelación cada vez que se disparan cohetes, y ha habido miles, los niños no pueden salir de sus casas".

Los esfuerzos de colaboración se extienden más allá de las fronteras, y representantes como John Enarson, de Cry for Zion, expresan la importancia de que los cristianos se solidaricen con la comunidad judía afectada por el conflicto.

"Lo que estamos haciendo ahora, lo que los cristianos hacen ahora, marca una gran diferencia. Dando de su sustento para apoyar al pueblo judío que ahora ha tenido que huir de sus casas por los ataques de Hamás en el sur, y vivir en hoteles con sus familias que han estado en refugios antiaéreos durante días y días. Así que estamos colaborando en todo lo que podemos. Represento a todos los cristianos que han hecho donaciones a través de Cry for Zion para ayudar a los refugiados de los cohetes en el sur", explica Enarson.

A medida que los evacuados, muchos de los cuales viajaron desde zonas rurales cercanas a Gaza, encuentran refugio en Jerusalén, experimentan el calor de una asociación entre judíos y cristianos que trasciende las fronteras geográficas. Para la mayoría de ellos, venir a Jerusalén es la primera vez que conocen a cristianos. Están abrumados por el amor que les llega de los cristianos de todo el mundo". Feldstein expresa: "Me emociona sólo de pensarlo, porque me toca ser el socio judío ortodoxo que reúne todo esto".

Aunque los signos de sanación son evidentes en las sonrisas y los bailes de los niños, la cruda realidad del terror persiste para quienes siguen cerca de la frontera de Gaza. "Es abrumador porque, por mucha fe que tenga, sigo siendo un hombre de 58 años con un hijo en el ejército y un yerno en el ejército, y tres nietos menores de 5 años.  Necesitamos que nuestros amigos cristianos de todo el mundo estén con nosotros. Esta es la oportunidad desde el peor horror que hemos vivido hasta ahora, el Holocausto; los cristianos no se pronunciaron entonces en general".

Feldstein reflexiona sobre la urgencia de la unidad mundial, diciendo: "Sólo oro para que salgamos de esto más fuertes, y digo unidos, no me refiero sólo a los judíos. Judíos y cristianos juntos".

¿Estás luchando contra la ansiedad o el estrés?

Dios quiere ayudarte a ganar esta batalla, conoce cómo en este enlace

Dios quiere ayudarte a ganar esta batalla, conoce cómo en este enlace