Una exposición recientemente inaugurada en el Museo de la Biblia en Washington, DC, muestra lo que se cree es el libro judío más antiguo del mundo.

El libro, de cinco por cinco pulgadas, fue desenterrado en Afganistán y está compuesto de oraciones matutinas del Shabat, poemas que se remontan al Antiguo Testamento y lo que se dice es la versión parcial más antigua de la Hagadá, una liturgia recitada en el Séder durante la Pascua, según el museo .

Se cree que el libro, conocido como el Cuartel Litúrgico Afgano, tiene unos 1.300 años de antigüedad y fue descubierto a lo largo de lo que una vez fue la ruta comercial de la Seda. El descubrimiento es parte de la exposición del museo, “Palabras Sagradas: Revelando el Libro Hebreo Más Antiguo”, y permanecerá en exhibición hasta enero.

“El ALQ es uno de los tesoros más preciados de la colección del museo, que nos sentimos honrados de custodiar y compartir con personas de todas las religiones”, dijo Bobby Duke, director de conservación interino del museo, según The Jerusalem Post . “Aclara nuestra comprensión del viaje de la Biblia a lo largo de las Rutas de la Seda y arroja luz sobre el diverso tapiz religioso, étnico y cultural de Afganistán a lo largo de la mayor parte de su historia”.

Un grupo de cristianos, judíos y musulmanes trabajaron en conjunto para rescatar la reliquia religiosa.

Hershel Hepler, curador asociado de manuscritos hebreos del museo, dijo que el ALQ “se suma a este conjunto internacional de grandes libros hebreos, reverenciados por su significado religioso y cultural y las historias de su supervivencia”.

Y la Fundación Judía Afgana dijo en un comunicado sobre el descubrimiento: “El manuscrito ALQ es realmente un regalo de Dios para todos los pueblos de todas las religiones”.

El primer descubrimiento de la existencia del libro se remonta a 1997, cuando un hombre perteneciente a los hazaras, un grupo étnico de las regiones montañosas de Afganistán, lo descubrió en una cueva. Protegieron el libro hasta 2001. Luego, en 2013, la familia Green, propietaria de Hobby Lobby y que ayudó a fundar el Museo de la Biblia, lo compró a un comerciante israelí. Sin saber de su pedigrí, los Green donaron el libro al museo en 2015.

En un principio se lo etiquetó erróneamente como un libro de “Egipto, alrededor del año 900 d. C.”, antes de que los académicos finalmente lo recategorizaran como un documento histórico significativo que se remonta a Afganistán.