Foto con fines ilustrativos

Un grupo de manifestantes prendieron fuego a unos locales comerciales el lunes durante una marcha no autorizada en Chile, alcanzando dañar el templo de una iglesia y un canal de televisión cristiano.

El corresponsal de Mundo Cristiano en Chile, Israel Vilches, informa que se trata de la Iglesia Bendecidos para Bendecir y el canal Gracia TV.

“Esos dos lugares quedaron completamente destruidos por las llamas y el testimonio de las personas que estaban ahí es que los manifestantes lanzaron objetos incendiaros por las ventanas del tercer piso, hacia ese lugar, que era una iglesia que estaba instalada hace poco tiempo ahí, tenía pantallas grandes que transmitían mensajes cristianos. Desde afuera era perfectamente reconocible que había una iglesia ahí”, relató Vilches.

“Al lado había un hotel donde en el salón, los días domingos funcionaba una iglesia y los manifestantes saquearon las bodegas de esa congregación que funcionaba ahí. Desde el quinto piso hacia el hotel incendiaron completamente el edificio y bueno salvaron unas pocas cosas. Pero, la verdad fue muy poco lo que pudieron hacer frente a una turba que estaban provocando esos incidentes”, añadió.

Si usted colaborar con la congregación puede hacerlo al ingresar aquí.

El pastor Josué Muñoz, quien lidera la Iglesia Bendecidos para Bendecir y Gracia TV, dio a Mundo Cristiano su versión sobre los hechos.

“(Los manifestantes) vinieron destruyendo todo lo que se encontraron a su paso. Tanto fue así, que cuando llegaron a la esquina donde estamos ubicados, comenzaron a incendiar un McDonald’s, que está justo en el centro de Santiago. Nadie se preocupó por apagar las llamas, las cuales se fueron propagando más y más. Hasta que llegó el momento en que explotó todo, porque como es lo más lógico tienen aceite, nos alcanzó a nosotros en el tercer piso. Al explotar, reventó por una pared y se quemó todo”, comentó.

Debido al incendio, el pastor Muñoz asegura que unas 12 personas que trabajaban en la iglesia, quedaron desempleadas.

“Estas personas, no van a tener un lugar donde trabajar. Secretario, contador, aseador, cocinero, pintor, albañil, carpintero, etc. Ellos que trabajan continuamente en el salón, no van a tener un lugar donde trabajar, se les acabó su fuente de trabajo”.

Además de esto, el pastor calcula los daños materiales en unos $250.000. Sin embargo, agradece a Dios porque no hubo pérdidas humanas. 

“Gracias al Señor no hubo nadie herido. Solamente quedábamos el hermano que cuida el salón y yo. Pudimos salir adelante, corriendo en medio del humo y en medio del incendio. El Señor nos guardó y nos cuidó por su misericordia”.

 Pese a perder lo material, el pastor Muñoz se mantiene con una actitud positiva.

“Somos una congregación de aproximadamente de 500 hermanos, va a ser difícil encontrar un lugar para ese número. Pero, sin duda Dios tiene un lugar. Así como llegamos ahí, Dios nos va a proveer lo que viene”.

Si usted colaborar con la congregación puede hacerlo al ingresar aquí.