Varias iglesias evangélicas de El Salvador han atendido la petición del gobierno de que presten sus instalaciones, es decir templos, salones o colegios, como “centros de cuarentena durante el actual estado de emergencia por la pandemia mundial del COVID-19”.

La petición realizada por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) busca alojar en las iglesias por 30 días a “salvadoreños que hayan quedado varados en el extranjero y se les autorice su regreso al país, una vez existan las condiciones legales para hacerlo; y segundo a aquellos retenidos por violar la cuarentena domiciliar establecida por el gobierno”, así lo indica la Alianza Evangélica de El Salvador en un comunicado.

La Alianza asegura que, el gobierno se compromete, a adecuar las instalaciones y asumirá los costos, “además de cubrir la logística necesaria y gastos de consumo de servicios de agua y electricidad”.

“No dudamos que el espíritu que nos mueven como emisarios del evangelio en El Salvador es de poder bendecir a nuestros ciudadanos, reflejando el carácter de Cristo Jesús en medio de la crisis. Les solicitamos poder considerar la petición de nuestras autoridades y expresarnos su decisión a la brevedad”, añade el comunicado.

El su comunicado la institución aclara que “cada pastor y cuerpo de liderazgo de cada iglesia tendrá la autoridad si aceptan los términos planteados por el MOP a entera satisfacción, para lo cual deberá haber un convenio firmado por ambas autoridades competentes (MOP e iglesia local).

La Alianza Evangélica de El Salvador dejó en claro que esta no es una disposición obligatoria para los ministerios asociados. “El rol de la Alianza Evangélica solamente es de establecer los puentes de comunicación entre las iglesias evangélicas y MOP y de ninguna manera tomamos como Alianza Evangélica ninguna autoridad sobre las iglesias socias o ministerios asociados”, dice el comunicado.