Evangélicos esperan que nueva Constitución chilena respete los valores cristianos

Evangélicos esperan que nueva Constitución chilena respete los valores cristianos

10-27-2020
Chile

El presidente chileno, Sebastián Piñera, llega al palacio presidencial de La Moneda un día después de un plebiscito en el que la gente votó a favor de reescribir la Constitución de la nación en Santiago, Chile, el lunes 26 de octubre de 2020. (AP Foto/Esteban Felix)

El estallido social que sacudió sus calles en 2019 no fue en balde: Chile tuvo el lunes un despertar histórico, pues durante la jornada inició un inédito proceso para reescribir su Constitución.

La decisión fue tomada por los mismos chilenos que salieron a manifestarse hace un año. En un plebiscito ocurrido la víspera decidieron el reemplazo de la Carta Magna y que su redacción quede en manos de ciudadanos en lugar de políticos. En las urnas también determinaron que la convención de 155 miembros elegidos democráticamente para redactarla sea paritaria, es decir, que 78 de ellos sean hombres o mujeres.

¿Qué opina la Iglesia Evangélica sobre esto?

El obispo y director de la Televisión Evangélica de Chile, Emiliano Soto, habló con Mundo Cristiano sobre la Iglesia y el plebiscito.

“Al interior de la Iglesia Evangélica siempre se miraron dos ópticas, una que estaba por el apruebo y otra que estaba por el rechazo”, dijo.

Como él lo expresa, la votación estuvo bastante reñida entre la Iglesia.

“La entidad Cadem, que es una entidad de respeto en Chile, con respecto a lo que significan las encuestas, apunta de casi el 57%, sino es el 60% de los evangélicos en Chile votaron por el apruebo y el resto votó por el rechazo”, precisó

Soto dice que los líderes evangélicos esperan que en la nueva Constitución se siga respetando los valores cristianos.

“Ahora para proponer una nueva Constitución se apunta especialmente a una igualdad religiosa y también, lo más posible en la diferencia de conceptos a los principios valóricos y principios bíblicos, se opte a que exista objeción de conciencia a nivel Constitucional”, comentó.

El pastor Soto espera que la Iglesia pueda colaborar con la nueva Constitución.

“Esperamos que toda esta situación ya se supere y podamos también mirar a un solo Chile por el cual objetivo de poder hacer una buena Constitución o mejor Constitución de la que existe. Igualmente, la Iglesia pueda unirse en pro del trabajo que los evangélicos siempre hemos hecho en Chile”.

Más detalles sobre el plebiscito

Patricio Santamaría, presidente del Servicio Electoral, informó el lunes que con 7,5 millones de sufragios contabilizados —el 99,4% de los votos—, un 78,2% favoreció el reemplazo constitucional impulsado por la oposición de centroizquierda y un 21,7% optó por la propuesta del oficialismo de derecha de mantenerla. Además, el 79% prefirió que la nueva Carta Magna sea escrita por ciudadanos electos.

“Estamos frente a la mayor votación de la historia de Chile desde el punto de vista... de votos absolutos, y rompimos la barrera que no (se) superaba desde el 2012 con voto voluntario, el 49,2%”, añadió Santamaría.

Los convocados a sufragar en medio de la pandemia, que mantiene al país con 500.000 contagiados, eran 14,8 millones de personas y votó el 51%.

La decisión de que la nueva Constitución la escriban ciudadanos elegidos “hay que interpretarla como un rechazo generalizado y transversal a la clase política en su conjunto”, dijo a The Associated Press Marcelo Mella, politólogo y doctor en Estudios Americanos. “Todos los partidos con representación parlamentaria deben sentirse interpelados”, añadió.

“Los partidos políticos están callados y es un golpe muy fuerte a la política convencional, porque en aquellos lugares donde hay alcaldes de derecha igual ha ganado la opción del apruebo”, indicó Lucía Dammert, licenciada en historia de la Universidad Católica y académica de la Universidad de Santiago.

La nueva Constitución propuesta por la convención que la redactará será sometida a la aprobación de los chilenos en un plebiscito a mediados de 2022. Si fuera rechazada, seguiría vigente la de los militares.